Ovídate de tu caldera gracias a nuestras nuevas calderas de CLASE 5 para el próximo año:
Cada vez son más los hogares que optan por las calderas de biomasa de Clase 5, una tecnología que permite disponer de agua caliente y calefacción a precios muy competitivos y, además, con un bajo impacto medioambiental y una gran fiabilidad de funcionamiento.
Las calderas de biomasa utilizan como combustible el pellet, una especie de comprimido hecho de materiales forestales o agrícolas, como maleza, ramas o restos de podas o cosechas. Frente a la leña, los pellets son ligeros y pequeños, pero tienen un alto poder calorífico y un gran rendimiento energético: producen mucho calor, apenas generan residuos y emiten pocos gases al ambiente. Además, como están hechos con materia orgánica renovable, son más ecológicos.
Por todo esto, disponer de una caldera de pellet es una de las formas más cómodas, baratas y respetuosas de tener agua caliente y calor. Y, si se elige una caldera que incluya en su precio el servicio de mantenimiento, será como olvidarse de que existe, porque todo el proceso está automatizado y, si surge algún problema, los técnicos se ocupan de solucionarlo.
Un calor diferente y natural de 5 estrellas
Calderas de clase 5; las calderas se clasifican según sus emisiones en clase1,2,3,4 y 5 (ranking de la UE) , siendo la clase 5 la de mayor clasificación y por tanto menos emisiones aporta al ambiente, por debajo de 70mg/kWh de NOx.
Además de las ventajas mencionadas, cabe señalar que el calor que produce la biomasa es muy natural y agradable, capaz de generar una gran sensación de confort.
Y, por si todo esto fuera poco, es una forma de calefacción muy barata, porque los pellets de biomasa permiten ahorros de hasta el 50 por ciento en la factura de la calefacción.
Por tanto, elegir una calefacción que funcione con una caldera de biomasa es una alternativa más que rentable a otros modelos más contaminantes. Si el usuario añade un servicio de mantenimiento y suministro de pellet, estamos ante una combinación totalmente recomendable, un ahorro en lo que pagamos por la calefacción y una importante contribución a reducir la dependencia de los combustibles fósiles y sus efectos perniciosos sobre el medio ambiente y la salud.