Es durante el invierno cuando las economías domésticas sufren mayores problemas, ya que los costes en calefacción durante estos meses aumentan de forma considerable. Es por este motivo por el que muchos hogares están optando por las energías renovables como fuentes principales de calor, como son las placas solares fotovoltaicas

Si se tiene en cuenta que el ACS o agua caliente de uso sanitario de una vivienda supone en torno al 25 % del consumo energético total, la cota de ahorro que supondría la instalación de placas solares es bastante considerable.

Es una forma muy inteligente de calentar una casa si además lo complementamos con una estufa o caldera de pellet.

Ventajas de las placas solares

Las placas solares constituyen un sistema de aprovechamiento de la luz solar para convertir esta en energía calorífica. Aunque todavía no es un método demasiado extendido entre los particulares, al menos en España, cada día son más los hogares que se sirven de esta energía para complementar otras más comunes como el gas o el combustible.

Entre las ventajas que esta alternativa ofrece, la más destacada es el ahorro considerable en la factura generada por el disfrute de la calefacción, ya que gracias a las placas solares el ahorro anual por hogar oscila entre 75 y 150 euros. Estas cifras pueden parecer poco significativas, pero realizando el cómputo a lo largo de toda una vida, alcanzan una magnitud bastante elevada.

Por supuesto, otra de las ventajas destacables es la aportación que suponen en el objetivo de preservar el medio ambiente frente a las alternativas más utilizadas como el gas, el petróleo o el carbón, altamente contaminantes.

Cada día parece más necesario adquirir conciencia de la necesidad de proteger el entorno natural y los recursos de los que se dispone, ya que son limitados. Sacar partido de las energías solares o eólicas permite, sin duda, hacer un aprovechamiento limpio de los recursos naturales sin perjudicar al planeta.